9.7.12

La geografía literaria de Carlos Fuentes

"La palabra literaria de Carlos Fuentes jamás sale ilesa", aseguraba la escritora brasileña Nélida Piñón. Cuando se cumplen dos meses de la muerte del narrador mexicano nacido en Panamá, las geografías literarias y humanas de Fuentes serán objeto esta semana de evocación y homenaje por parte de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. Narrador "disciplinado", Carlos Fuentes mantuvo en las dos últimas décadas una intensa relación con la Universidad reflejada en foros académicos, tribunas literarias y cursos. Premio Internacional Menéndez Pelayo, su paso por Santander y Santillana del Mar, su presencia activa en las aulas certificaron su querencia por la vida cultural y académica generada desde La Magdalena. Además, Fuentes siempre defendió a Cantabria como un puente natural con América Latina.
Piñón, en la cita celebrada en la Torre Don Borja hace cinco años, sostenía que la palabra del autor de 'Cambio de piel' "interpreta los dictámenes de la vida, activa la contundente convicción de que la narrativa conjuga carne y verbo, y de tal simbiosis mestiza refuerza su saber y su imaginación elocuente".
La muerte de Artemio Cruz, saludada como una obra maestra y un clásico, es una de las señas de identidad del escritor "culto y universalista", que se rebeló "voluntarioso contra el canon literario".
Para recordar a este autor "inaugural y transgresor, de verbo creador y portavoz de las aflicciones humanas sin eludir la complejidad colectiva", la UIMP y la Fundación Santillana han convocado este acto en el que intervendrán el rector Salvador Ordóñez; Belisario Betancur, expresidente de Colombia; Juan Luis Cebrián, escritor y académico; Gonzalo Celorio, escritor; Julio Ortega, crítico literario; Jorge Volpi, escritor, y la periodista y Silvia Lemus, viuda de Carlos Fuentes. Asimismo, asistirán al homenaje dos amigos cercanos de Fuentes: Leopoldo Rodás y Plácido Arango.
Además de su presencia en la trayectoria del ciclo de los Martes Literarios, que patrocina este periódico, el que fuera uno de los ejes del boom latinoamericano inauguró, junto a Juan Goytisolo y el Nobel José Saramago, el primer encuentro internacional 'Lecciones y maestros', que programó la UIMP junto a la Fundación Santillana. Fuentes no sólo obtuvo el citado galardón que creó y patrocinó el presidente de la Fundación Cervantina de México, el publicista santanderino Eulalio Ferrer, sino que fue uno de los pilares culturales e intelectuales simbólicos entre su país y Cantabria.
El narrador, integrante de la biografía intelectual de toda una generación, se sumó con la distinción a la excelsa nómina de galardonados como Octavio Paz y Ernesto Sabato.
Confesiones creativas
Hacia las siete y media de la mañana se sentaba a escribir y hacia las doce interrumpía el trabajo, "sabiendo lo que ignoraba e ignorando lo que sabía". Carlos Fuentes, que eligió el ámbito académico de la UIMP para prestarse excepcionalmente a hablar de su vida y su escritura, sostenía que "en el sueño aparecen los muertos que amamos, los fantasmas de la creación y sus destinatarios".
A su juicio, «soñar es crear» porque en el sueño se dan los estados de la gestación.
El autor de Los años con Laura Díaz, para quien "una novela quiere añadir algo al mundo, crear realidad no sólo nueva sino más realidad", subrayaba que su vida era "un libro que se sostiene de pie gracias a dos pilares: su tío, poeta, que falleció a los 21 años de tifus, y su hijo, ambos llamados Carlos, "tocayos de la vida", a los que no sabía si atribuirles lo que escribe. "Ya no sé si lo que escribo me pertenece o me lo dictan ellos".
Fuentes dejó siempre impresas las huellas de una escritura profunda y reflexiva. La literatura, opinaba, "mantiene viva la imaginación y el lenguaje", dos realidades "sin las cuales las sociedades perecen". Prolífico y batallador, se reinventaba cada día y nosotros con la lectura de sus geografías literarias.

No hay comentarios: